sábado, 19 de noviembre de 2016

Identidad


Es curioso como el hecho de tener este blog y empeñarme en salir un poco de mi ostracismo compartiendo retazos de ideas, reflexiones o como lo quieras llamar me ha hecho replantearme mi identidad. ¿Qué es lo que me identifica o diferencia? ¿Cuál es mi esencia? ¿Qué dejo entrever de mí en mis palabras? ¿Y hasta qué punto es real y no lo que yo diseño y elijo para mostrar? Al fin y al cabo esta plataforma me permite construirme una identidad desde cero y aunque mi propósito es ser lo más fiel a mí misma que pueda y que el blog sea una herramienta para mí y no un fin en sí mismo, no dejo de estar exponiéndome, y mi ego no quiere quedar mal.

Aún no he sido capaz de rellenar mi descripción en mi perfil del blog. ¿Qué es verdaderamente relevante? ¿Qué quiero destacar? Está claro que el aspecto que por la temática del blog domina, es la introversión y una cierta ansiedad social, pero no quiero reducirme a eso.

Los datos objetivos me resultan limitadores. ¿Realmente importan mi edad u origen? ¿Mi profesión, aunque no me guste? ¿Mis roles en la vida con respecto a los demás?

¿O es lo subjetivo? ¿Lo que me gusta o lo que no? ¿Mis opiniones? ¿Lo que hago o a lo que aspiro? 

En este viaje que he iniciado no solo busco momentos de soledad sino que también intento viajar ligera de equipaje. El minimalismo ha sido un concepto que me ha ayudado a ser más consciente en mis decisiones y en lo que incorporo a mi vida. Supongo que será un tema que saldrá de vez en cuando por aquí. Hoy lo traigo a colación porque uno de los blogs que encontré más inspiradores en un principio sobre este tema, The minimalists, me ha hecho también pensar en esto de la identidad. Cuando le preguntan a Joshua Fields Millburn qué es de lo que más le ha costado deshacerse, responde que de su identidad. Las cosas que adquirimos y que poseemos también nos representan y hablan de nosotros. Y yo, en mis inseguridad, he tenido momentos en los que le he confiado demasiado esa labor a lo material.

Consumir es sencillo. Resulta una manera fácil de transmitir mensajes. Mírame, tengo esta ropa, así que identifícame como x. Tengo estos libros en casa, es porque soy x. Las series que elijes ver o incluso la comida que decides tomar, todo te señala. Y aunque me quiera convencer de que las elijo libremente por preferencia mía tengo que reconocer que siempre está la sombra de la duda y la pregunta subyacente de qué dice esto de mí. 

Y comprar también te hace soñar. Supongo que todos aspiramos a algo. Tenemos esta imagen ideal de quien podríamos ser, qué podríamos estar haciendo si fuésemos nuestro mejor yo. Y de nuevo lo fácil es prepararse para ello, aprovisionarnos para cuando llegue ese momento en el que vamos a leer más o a aprender a hacer crochet y me procuro las agujas y aumento la colección de mi estanteria. Pero el siguiente paso, el importante, ese se queda en standby. Y me digo a mi misma que soy una persona creativa, pero nunca saco tiempo para aprender o poner en práctica eso que tanto me apetece en teoría. Me digo que soy amante de la cultura, pero un registro de mi actividad diaria no proporcionaría esa información. Así que, ¿quién soy realmente? ¿Mis buenas intenciones? ¿Mis no tan buenas actuaciones? ¿Mi proyección hacia fuera, editada y meditada? ¿Mi yo interior lleno de dudas?

La introversión parece ser que también conlleva darle demasiadas vueltas a las cosas, y las ideas hacen un tour completo por el cerebro haciendo parada en recuerdos, emociones, lógica, expectativas, posibles reacciones... antes de expresarse. Con lo que me cuesta saber cuánto queda de mí después de aplicar todos esos filtros y me da miedo haberme perdido demasiado por el camino. Creo que no estaría mal poder saltarme alguna parada.

Buscar la esencia de uno mismo no es tarea fácil, y yo no tengo muy claro por donde empezar. Pero quiero intentar aprender a escucharme más a mí misma sin cambiar la emisora rápidamente a la cadena "lo que puedan pensar los demás" Va a ser difícil, pero quiero serme fiel y no quiero fingir ser lo que no soy o aún no he conseguido ser. Así que mis dos caminos son intentar acercarme a mi yo ideal preguntándome siempre si mis acciones están alineadas con mis aspiraciones. Y no ponerme máscaras para enfatizar quien digo ser. Puedo dejar que mis palabras y acciones hablen por mí.

(Creo que algo que dejo entrever de mí es que no tengo una mente muy ordenada. ¿Alguna vez haré un post bien organizadito y centrado? :P También soy impaciente, tal cual va saliendo tengo que publicar. Planificación cero).

No hay comentarios: